Ayer lunes iba con el tiempo justo y no sabía si me iba a dar tiempo a correr, al final saqué 35' en el gimnasio y quemé 354kcal, que no vienen nada mal después de las comilonas.
Hasta el infinito y más allá es donde me llega la cabezonería y es que cuando me propongo algo no paro hasta conseguirlo.
Sin apenas entreno, me propuse hacer una media maratón, la terminé, sin parar, después de 2h30 y por delante de la ambulancia. Pero lo conseguí!! Ha sido de las mayores satisfacciones que he sentido nunca. Después de ese día supe que pasito a pasito se consiguen los retos. Hay que seguir superándose!
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